El verano se va secando y nos va dando sus últimos frutos. Y adentro de ellos a la par va madurando la semilla. Si tiene suerte, en pocos días se dejará envolver por la tierra y se dejará ser.
Pero tendrá que esperar algunas cuantas Lunas para que el afuera sea propicio para su brote
¿que importa? no hay apuro alguno.
Algún día quizá, cuando los hombres y mujeres entierren el carnaval, un fruto caerá de sus brazos
y adentro una semilla recorrerá su mismos pasos, con propio destino.
3 comentarios:
nuevamente la foto fue tomada por Martina (de 11 años) a quien (como a la mayoría de los niños del mundo) el deseo de explorar le permite observar cosas que los adultos olvidamos ver.
que hermosura! la foto y las palabras! felicítolos!!
Gracias amigo Santi! y gracias por pasarte por aquí. Un abrazo para vos
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